En México, la inflación se aceleró por cuarto mes consecutivo en junio, alcanzando un 4.98 por ciento anual, frente al 4.69 por ciento anual de mayo, según datos del INEGI. Esta es la primera vez desde enero-abril de 2021 que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) sube durante cuatro meses seguidos. La inflación mensual general subió un 0.38 por ciento en junio, superando la expectativa del mercado de 0.28 por ciento. La inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles, registró una tasa anual del 4.13 por ciento en junio, mientras que la inflación no subyacente, impulsada principalmente por los precios de frutas y verduras, fue del 7.67 por ciento anual, siendo este rubro el principal responsable de las presiones inflacionarias recientes.
Los productos agropecuarios, en particular las frutas y verduras, fueron los principales impulsores de la inflación en junio, con un aumento anual del 10.36 por ciento en sus precios. Entre los productos con mayor impacto en la inflación, el chayote registró un incremento mensual del 128.58 por ciento, la naranja del 31.37 por ciento, el aguacate del 17.65 por ciento y los plátanos del 13.98 por ciento. A pesar de este panorama inflacionario, la inflación subyacente muestra una tendencia a la baja, lo que podría permitir al Banco de México considerar una reducción de tasas en el futuro. Sin embargo, factores externos y condiciones climáticas adversas podrían retrasar estas medidas.
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