El pasado domingo fue el primer debate presidencial donde pudimos presenciar frente a frente a los 3 candidatos a la presidencia de la república, a diferencia de los legendarios debates que ha habido desde el 2000, con momentos memorables que han quedado guardados en la cultura popular mexicana, este debate fue demasiado gris donde al parecer cada uno ya tenia un rol completamente asignado.

La candidata del PRIAN tuvo un actuar demasiado pobre, sin argumentos y donde al parecer su única labor fue la difamación de Claudia Sheinbaum, una de las cosas que más llama la atención es que siempre quiere asumirse como candidata ciudadana, no quiere admitir que ella representa al PRI, PAN y los escombros del PRD, así como que detrás de ella están Alito Moreno, Marko Cortes y Jesús Zambrano, a esta alianza les gusta negarse a sí mismos y asumirse como una especie de organización ciudadana.

Llama la atención que el PRIAN cambie de estrategia de comunicación política cada que puede, simplemente la narrativa no cuaja, no es congruente y la gente no se convence por lo mismo; esperemos que para su segundo debate muestre más ya que en este parecía estar atada de manos.

De lado de Movimiento Ciudadano, Máynez cumplió con su papel de candidato no competitivo, como lo hizo Quadri en su momento o el mismo bronco pero tal vez un poco más serio ya que al menos el si puso temas a debate, propuso acciones de gobierno y habló de su visión de país, ganó simpatías y pareció ser una oposición mas responsable que la alianza del PRIAN.

Claudia Sheinbaum iba lista para recibir ataques, ella habló de un plan de gobierno especifico y habló de propuestas, incluso no se desgastó en contestar a todos los ataques, aunque se vio algo nerviosa mantiene la postura de una candidata puntera que incluso se sabe ganadora.

Respecto al formato del debate no hay nada que decir más que la Consejera del INE, Carla Humphrey hizo un pésimo trabajo y se notó el favoritismo a un frente, esperemos que después de las sanciones y el nuevo equipo que organizará el segundo debate mejore y permita que sea el ejercicio que la ciudadanía espera.

El noble oficio de la política exige autenticidad y definiciones, dice Andrés Manuel, principalmente un frente debe de sacarse la máscara y mostrar como son, dejen de disfrazar su ultra derecha.

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